La variedad base es Tempranillo (90%) de viñedos de más de 40 años de las zonas de Briñas, Labastida y Villalba perfectamente complementado con un 10% de Graciano de nuestras fincas Melchorón I y II de Briones y Rodezno.
Tras las fermentaciones alcohólicas y maloláctica, en enero de 2005 los vinos pasaron a barricas de roble americano de 4 años de edad, donde permanecieron cuatro años. Durante su crianza se trasegó cada seis meses por el método tradicional de barrica a barrica. Desde febrero de 2009, el vino ha permanecido en botella redondeándose y mejorando aún más sus componentes organolépticos.
Un vino rojo cereza, brillante, de capa media y ligero borde teja. Intenso aroma, elegante, complejo, destacando las notas balsámicas, vainilla, coco, chocolate y trufa, que envuelven un fondo de frutas confitadas. En boca es equilibrado, con elegante acidez y taninos envolventes, finos y sedosos. Su retrogusto es largo y complejo con recuerdos a torrefactos, especias y fruta confitada. Un vino que el paso del tiempo en botella continúa puliendo y cargando de finura y elegancia.
